Seguridad, fluidez, orden, transitabilidad, belleza arquitectónica, es lo que los capitalinos y capitalinas pueden hoy apreciar, tras la implementación del Plan de Recuperación del Centro Histórico de San Salvador.
Esta ha sido una tarea que implicó extensas jornadas de coordinación y preparación por parte del Viceministerio de Transporte el fin de semana, que junto a la Subdirección de Tránsito de la PNC, trabajó en eliminar la circulación de unidades de transporte en el centro histórico.
El Plan se ejecuta de Sur a Norte y de Oriente a Poniente, fueron liberadas del transporte colectivo 30 cuadras ubicadas dentro del perímetro del Centro Histórico de San Salvador, donde la población puede movilizarse tranquilamente sin el estrés que genera el congestionamiento, la concentración de población, la inseguridad y la contaminación por ruido y humo.
El VMT, tiene distribuye 4 versiones de mapas, con información desde los cuatro puntos cardinales, para que exista toda la orientación necesaria de los lugares donde se encuentran las paradas y zonas para abordar las unidades y sus destinos.
Un cambio que vale la pena
Para logra el propósito de recuperar esta importante zona histórica de la capital, se eliminó la circulación de unidades de transporte en el Centro de San Salvador y la mayoría de rutas transitaran en un anillo periférico alrededor del centro.
Son 165 las rutas de autobuses que previo al Plan circulaban en el Centro de San Salvador, de estas 39 ya no transitaran más por este sector, 42 experimentaran modificación de recorrido y 84 tendrán nuevas paradas autorizadas. Son 1,135 unidades a las que se les recortó el recorrido, 1,182 a las que se le modificó su recorrido, haciendo un total de 2,317 unidades intervenidas en el plan.
Para asegurar la orientación de los usuarios del transporte colectivo en este sector del centro capitalino, se han ubicado 80 paradas de autobuses y microbuses que son distinguidas por colores; rojo para Autobuses y Verde para Microbuses.
Señalización para orientar al usuario
Las medidas obedecen a un Plan ampliamente estudiado y coordinado en el que se involucran varias instituciones como la Secretaria de Asuntos Estratégicos, Ministerio de Seguridad, Policía Nacional Civil, Empresarios del transporte colectivo.
Este es solo el inicio del reordenamiento, y forma parte de los 14 acuerdos alcanzados entre el gobierno y la Mesa Nacional de Transporte.
El VMT ya dispone de 100 señales verticales de paradas de buses, 24 señales verticales informativas de rutas, 50 señales de no estacionar, 9 mil metros lineales de pintura termoplástica y 14 mil 800 metros lineales de señales de bordillo amarillo para los ejes preferenciales.
Los Ejes preferenciales se ubican en: Alameda Juan Pablo II; Primera y Tercera Calle Poniente-Oriente; 11 y 17 Avenida Sur (entre Alameda Juan Pablo II y Calle Gerardo Barrios); Cuarta Calle Poniente entre 11 y 25 Avenida; y se ha reactivado Ejes Preferenciales en la 8ª y 10ª Avenida.
Divulgación de medidas
Para prevenir confusión en los usuarios del transporte, se han instalado cuatro canopis con información ubicados en: Plaza Libertad, Parque Infantil, Parque Cuscatlán y Parque Simón Bolívar. Además se entregará casa por casa un millón de hojas volantes informativas.
Asimismo han sido desplegados 302 elementos policiales, entre ellos 194 de la Subdirección de Transito, 54 de Seguridad Pública, 40 de la Unidad de Mantenimiento del Orden, 8 agentes de la Policía de Turismo, 3 del GAP y 3 del 911.
Las calles en un área de 30 cuadras hoy lucen despejadas y les convierte en una invitación al turista y a la población en general a disfrutar de la belleza arquitectónica que predomina en muchos de los edificios construidos algunos a los inicios del siglo XX, y que han permanecido olvidados en medio del ruido y otros contaminantes.
El transitar por esta zona liberada, es ahora un sueño hecho realidad, el VMT dio el paso que nadie se atrevió a dar en beneficios de los salvadoreños y turistas extranjeros.
El Palacio Nacional, Catedral Metropolitana, Teatro Nacional, Plaza Cívica, Plaza Libertad, Plaza Morazán, y otras edificaciones con rasgos arquitectónicos coloniales, que este año recobran importancia por la conmemoración del bicentenario. Con la recuperación estas obras de arte pueden ser apreciadas a plenitud, con la garantía que se encuentra en una zona segura sin el riesgo que representaba en el pasado.