El Ministerio de Obras Públicas (MOP) avanza en la construcción de los nuevos recintos fronterizos en El Amatillo, La Unión; y Anguiatú, Santa Ana. La modernización de estos recintos es parte de un plan maestro para reducir los costos y tiempos del transporte.
Estas obras son ejecutadas por el MOP a través de FOMILENIO II, con el objetivo de reducir el tiempo de espera por el paso de las fronteras, de un promedio de ocho horas a 30 minutos, y hacer eficientes los procesos de trámites de ingreso y salida de estos recintos a través de un moderno sistema informático que facilitará el paso.
Actualmente, los exhaustivos procesos de control que se realizan en las fronteras sin equipamiento tecnológico, genera altos costos de transacciones, tiempos largos de permanencia en la frontera y elevado riesgo de fraude fiscal, y es lo que el Gobierno busca evitar.
Recinto fronterizo El Amatillo, La Unión. Se construye con una inversión de $15.3 millones y presenta un avance del 53%. La inversión abarca la construcción de tres edificaciones que serán utilizadas para: 1) administración y gestiones; 2) revisión física de los medios de transporte; y 3) habitaciones para descanso de funcionarios, cafetería y baños. Se ubica en cantón Santa Clara, Municipio de Pasaquina, La Unión.
Asimismo, incluye el equipamiento con mobiliario y tecnología, para reducir los tiempos de espera, por medio de la gestión de trámites en línea o el uso de equipo como escáner, identificación por radio-frecuencia de transporte de mercancías, lectura de placas vehiculares, cámaras de control, entre otros. La información recolectada por medio de la implementación de un Sistema de Control de gestión (SCG) permitirá generar información estadística y de gestión de calidad apta para la toma de decisiones.
El paso de frontera El Amatillo, entre El Salvador y Honduras, en lo referente al transporte de cargas, es de gran importancia tanto bilateral como regional, ya que es la principal vía terrestre utilizada para el comercio entre El Salvador y Honduras. Además, es un paso fuertemente demandado por el comercio bilateral de El Salvador con Nicaragua, Costa Rica y Panamá y por el intercambio de México y Guatemala con Honduras.
Recinto fronterizo Anguiatú, Santa Ana. El Puesto de frontera de Anguiatú permite el paso de mercancías por medio de transporte de carga entre El Salvador y Guatemala, y reviste importancia desde el punto de vista bilateral como regional. Se trata de la principal vía terrestre utilizada para el comercio bilateral entre El Salvador y Guatemala y es muy demandado a nivel regional.
Se construye con una inversión de $14,171,546.25 y actualmente presenta un avance del 41.46%. Con la modernización del Puesto Fronterizo Anguiatú se pretende disminuir drásticamente los tiempos de gestión de las unidades a unos niveles que permitan una operación de comercio exterior competitiva en tiempo y costo.
Las nuevas instalaciones consta de dos edificios principales, área de escáner, parqueos, áreas de atención al público, casetas de control, áreas verdes, áreas de circulación, áreas de protección, planta eléctrica, entre otros. Incluye desarrollo de soluciones informáticas e integración de elementos tecnológicos, para la identificación por radio frecuencia, cámaras para video vigilancia y lectura de placas, sistemas de comunicación, de control de acceso vehicular, señalética inteligente, control de cargas y otros.
7 de mayo de 2021