La respuesta interinstitucional incluye una contribución económica, asistencia técnica y legal, así como las obras de mitigación en la zona afectada.
El gobierno del Presidente Mauricio Funes está dando una respuesta integral a las 41 familias que han resultado afectadas por las cárcavas de la Colonia Llano Verde, Ilopango, que han destruido algunas viviendas de la comunidad y han puesto otras en peligro inminente, con las consecuentes repercusiones en su situación habitacional.
Esta situación ha sido el producto de la falta de atención de los gobiernos anteriores a los llamados de la población, el irrespeto a las normas de construcción y la no existencia de políticas de prevención, lo que ha generado una grave amenaza a la vida humana. Es por eso que en 8 años el costo para solucionar el problema pasó de $12,000 a más de $3 millones.
En ese sentido, desde los primeros días del actual gobierno, se han desarrollado acciones para atender inmediatamente el problema, a través de la respuesta contingencial de Protección Civil y las obras de mitigación que realiza el Ministerio de Obras Públicas.
Además, el Presidente Funes dio instrucciones para la creación de una comisión interinstitucional de alto nivel para dar una solución técnica y jurídica, a través de una mesa de diálogo en la que también participan las personas afectadas y la Alcaldía de Ilopango, a fin de atender a todas las familias de manera personal, para facilitarles la reubicación y la adquisición de una vivienda digna.
De acuerdo a las inspecciones realizadas por el Ministerio de Obras Públicas y luego de determinar, a través del Viceministerio de Vivienda y Desarrollo Urbano, la situación en la que se encentran cada una de las viviendas, el Gobierno, dará una contribución de hasta $10,000 para cada una de las 28 familias propietarias, cuyas casas hay que demoler, por encontrarse en situación de alto riesgo.
Las familias que sean beneficiadas con la asignación antes mencionada se responsabilizarán de buscar, por su propia cuenta, la alternativa que más les convenga para solucionar su problema habitacional, que puede ser la prima de una casa de las que están a disposición en el mercado, incluyendo las del Fondo Social, FONAVIPO, compra de una casa usada, contrapartida de otra donación, etc..
Las familias deberán reportar al VMVDU qué harán con el aporte otorgado por el Estado. De las 41 familias que se encuentran en situación de riesgo existen 13, cuyas viviendas no es necesario demoler y que superarán su situación riesgosa, luego que se realicen las obras de mitigación por parte del Ministerio de Obras Públicas. Estas familias deberán buscar un lugar de alquiler para vivir mientras duren las obras de reparación de la cárcava.
Para estos efectos el Gobierno apoyará con una cuota de $150 mensuales. Luego podrán retornar a sus respectivas casas.
Durante las inspecciones efectuadas por el Ministerio de Obras Públicas, en coordinación con Protección Civil y el VMVDU, de las 28 familias a quienes se les otorgará $10,000 a cada una por haber perdido en su totalidad sus viviendas y que ya no podrán retornar al asentamiento, hay 6 que todavía viven en esas casas y se encuentran en grave peligro. Para mientras encuentran una solución que cubrirán con la contribución del gobierno se les otorgará $150 para un alquiler mientras encuentran una vivienda definitiva. El resto de las 28 familias que recibirán la asignación antes mencionada ya desalojaron el lugar.
El Plan de Evacuación se ejecutará el próximo sábado 26 y domingo 27 de septiembre, el cual estará coordinado por Protección Civil.
Las obras de mitigación iniciadas por el Ministerio de Obras Públicas continúan y serán concluidas en su totalidad, para poner fin al riesgo que representan las cárcavas para la vida de las personas que habitan en este lugar.
San Salvador, 24 de septiembre de 2009