Más de 500 metros cúbicos de tierra y piedras, producto del derrumbe de un talud que obstaculizan los dos carriles de la Colonia La Cima I, están siendo removidos por trabajadores del Ministerio de Obras Publicas, con la finalidad de habilitar lo antes posible el paso por este sector.
El derrumbe se ubica en las inmediaciones del primer redondel de La Cima, un populoso sector que se vio afectado por el congestionamiento vehicular debido al desprendimiento del alud.
Las lluvias registradas en las últimas horas han provocado que los taludes presenten saturación de agua y se mantengan vulnerables a desprendimientos, igualmente se han ocasionado inundaciones en algunos sectores, los cuales están siendo controlados por el MOP.
En La Cima, el MOP mantiene personal y maquinaria desde tempranas horas para retirar los escombros que obstaculizan el paso. De acuerdo a estimaciones de los técnicos del MOP son más de 40 camionadas de tierra de 10 toneladas cada uno de piedras y ramas de arboles los que serán removidos del lugar para dejar la vía limpia la zona, tarea en la que también interviene Fovial.
En Residencial La Gloria, Mejicanos, las lluvias del fin de semana y de este lunes inundaron nuevamente los pozos por lo que se realiza labores de evacuación con bombas achicadoras de agua. Por la situación del clima no se ha continuado la limpieza de escombros en la bóveda y se espera que la situación mejore para reanudarlos.
Asimismo, el MOP ya cuenta con los planos del sistema de drenajes construidos por la empresa que edifico las viviendas en La Gloria, para buscar una solución al problema que impide la localización de un tapón que obstruye la normal circulación del agua y que provoca el rebalse de los pozos.
Mientras, en Residencial Victoria, Soyapango, el MOP trabaja en la eliminación del agua con bombas achicadoras que el fin de semana volvió a inundar la zona.
Tanto en la Gloria como en el sector de la Maraly de Residencial Victoria, el MOP trabaja desde el fin de semana para resolver las emergencias provocadas por las lluvias.
San Salvador, 30 de agosto de 2010
