La entrega de la obra la realizó el Ministro Gerson Martínez, a las autoridades de la Iglesia ELIM y a los familiares de las víctimas.
Con este memorial, el Gobierno cumple otro de los puntos señalados por la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) en su resolución, tras la tragedia en la que murieron los 32 feligreses de la Iglesia ELIM.
La ejecución de obras de protección en la zona donde se dio el incidente contemplado en la resolución de la Procuraduría ya fue cumplido, se ejecutaron a un monto de 2.1 millones de dólares y está beneficiando a unos 100,000 habitantes de la zona sur de San Salvador, que por años se vieron afectados por las inundaciones en época de invierno.
Esta plaza fue diseñada por representantes de la ELIM y técnicos del MOP, con la finalidad de brindar un espacio de estadía y reflexión para los familiares de las víctimas, especialmente en la fecha de conmemoración y como un recordatorio de la responsabilidad que como sociedad tenemos de preservar el medio ambiente y evitar nuevas tragedias.
Busca entre otros, crear una obra de infraestructura social a fin de contribuir a la reparación psicológica y emocional de las familias que perdieron a sus seres queridos, en este sector.
El trágico incidente se produjo por la falta de obras de protección en la zona y el Estado salvadoreño fue declarado responsable de los hechos acontecidos, según la resolución de la PDDH, en oficio recibido por el MOP denominado “Informe Especial en relación a los lamentables hechos acontecidos la noche del 3 de julio de 2008, en zona de Arenal de Monserrat”.
La Plaza Memorial, cuenta con un área total de 90 metros cuadrados y tiene una capacidad para albergar unas 110 personas. Los acabados son rústicos, posee revestimiento de piedra y aves de granito que representa la perdida de amigos o familiares. La roca en el Memorial posee el concepto de fortaleza y esencialidad de los vínculos que comparten las familias y personas en general vinculadas con el accidente.
La pared memorial, tiene siete metros de largo, una altura que va de 1.50 a tres metros, posee una sustracción de palomas que simbolizan el volar de las aves hacia el horizonte, su destino. Además posee una transición que se simboliza en el cambio de altura de la pared.
La plaza promueve una conciencia ambientalista, por ello el piso se construyó con ecoquín que permite el crecimiento de grama, cuenta con jardines, áreas verdes y bancas para el descanso de los familiares de las víctimas.
Cuenta con luminarias, mosaicos en muro y dos placas de granito negro de 1.20 por 1.60 metros, en la que va la cita bíblica Mateo 13:43 “Los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre”, y un texto en memoria de los fallecidos, que al igual que la cita fue a petición del guía espiritual de la Iglesia ELIM.
La placa incluye los 32 nombres de los fallecidos que van por edades y familias. El diseño lleva un sistema de iluminación empotrada al piso, lo que hace que por las noches se convierta en una lámpara urbana, que busca iluminar el espacio público y transformarlo.
El Memorial nace de la necesidad de brindar un espacio para aquellas personas que no pudieron recobrar los cuerpos de sus familias, los cuales no poseían un lugar donde recordar a sus familiares y amigos.